viernes, 9 de agosto de 2013

Más barroco en Ragusa Ibla

El terrible terremoto de 1693 destruyó completamente Ragusa. Una nueva ciudad se levantó entonces al oeste, sobre una meseta más elevada: Ragusa Superiore.  Sin embargo, los nobles prefirieron reconstruir la ciudad en el mismo sitio; la vieja Ragusa renació del polvo y es la Ragusa Ibla de hoy, otro tesoro del barroco en Sicilia. Las dos ciudades quedaron unidas en la década de 1920.




El duomo de Ragusa Ibla es San Giorgio (1738-1744), una joya de Rosario Gagliardi, con una impresionante fachada-campanario en tres niveles (tres órdenes), con columnas libres que juegan con la superficie curva y un espléndido juego de colores entre la piedra blanca-rosada y la piedra gris.




A los pies del duomo nace el corso xxv Aprile, que lleva hasta la "punta", donde está el Giardino Ibleo. Este es el corso xxv Aprile, en la Piazza del Duomo. Abajo, una librería parienta de este blog.



Y este es el Giardino Ibleo, un lindísimo parque público. Desde la punta se ve un paisaje muy bello, de colinas, con sectores cultivados y otros de bosques.




Al costado de la entrada del Giardino Ibleo está lo que quedó de la chiesa di San Giorgio Vecchio, donde San Jorge sigue manteniendo a raya al dragón. ¡Qué no lo suelte!



San Giorgio no es la única iglesia de Rosario Gagliardi en Ragusa Ibla. También está San Giuseppe, sobre el corso xxv Aprile, entre el duomo y el Giardino Ibleo. Una preciosura.


Aquí están la chiesa de Santa Maria dell'Itria y el palazzo Cosentini, ubicados en la unión de las dos ciudades.







Y aquí la chiesa delle Santissime Anime del Purgatorio, en ese mismo sector. Esta iglesia casi no sufrió daños con el terremoto.


Ragusa Ibla tiene calles angostas y un plano enmarañado. Claro que si uno se pierde nunca aparece demasiado lejos del duomo. Ragusa Ibla tendrá, en línea recta, unos 1100 metros de largo y 300 en la parte más ancha. Con todo es difícil ubicarse. No entiendo por qué en esta ciudad, más que en otras, siento como una necesidad de exhaustividad: quisiera recorrer todas las calles, no perderme, conocer el nombre de cada vicolo, saber dónde queda cada cosa.





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